Contabilidad retroactiva

La contabilidad retroactiva es cuando se espera hasta que se complete la fabricación de un producto y luego se registran todas las emisiones de inventario relacionadas que se requirieron para crear el producto. Este enfoque tiene la ventaja de evitar todas las asignaciones manuales de costos a los productos durante las diversas etapas de producción, eliminando así una gran cantidad de transacciones y el trabajo administrativo asociado. La contabilidad retroactiva está completamente automatizada, con una computadora que maneja todas las transacciones. La fórmula para ello es:

(Número de unidades producidas) x (recuento de unidades enumeradas en la lista de materiales para cada componente)

= Número de unidades de materia prima extraídas del stock

El backflushing es una solución teóricamente elegante a las complejidades de asignar costos a los productos y aliviar el inventario, pero es difícil de implementar. La contabilidad retroactiva está sujeta a los siguientes problemas:

  • Requiere un recuento de producción preciso . El número de productos terminados producidos es el multiplicador en la ecuación de flujo retroactivo, por lo que un conteo incorrecto aliviará una cantidad incorrecta de componentes y materias primas del stock.

  • Requiere una lista de materiales precisa . La lista de materiales contiene un detalle completo de los componentes y materias primas utilizadas para construir un producto. Si los elementos de la factura son inexactos, la ecuación de retrolavado aliviará una cantidad incorrecta de componentes y materias primas del stock.

  • Requiere un excelente informe de desechos . Inevitablemente, habrá cantidades inusuales de desechos o reprocesos en un proceso de producción que no se prevén en una lista de materiales. Si no elimina por separado estos artículos del inventario, permanecerán en los registros de inventario, ya que la ecuación de toma retroactiva no los tiene en cuenta.

  • Requiere un ciclo de producción rápido . El retrolavado no elimina los artículos del inventario hasta después de que se haya completado un producto, por lo que los registros de inventario permanecerán incompletos hasta que ocurra el retrolavado. Por lo tanto, un ciclo de producción rápido es la mejor manera de mantener este intervalo lo más corto posible. Bajo un sistema de retrolavado, no hay una cantidad registrada de inventario de trabajo en proceso.

El retrolavado no es adecuado para procesos de producción prolongados, ya que los registros de inventario demoran demasiado en reducirse después de la finalización final de los productos. Tampoco es adecuado para la producción de productos personalizados, ya que esto requeriría la creación de una lista de materiales única para cada artículo producido.

Las precauciones planteadas aquí no significan que sea imposible utilizar la contabilidad retroactiva. Por lo general, un sistema de planificación de fabricación le permite utilizar la contabilidad retroactiva solo para ciertos productos, por lo que puede ejecutarla de forma compartimentada. Esto es útil no solo para probar el concepto, sino también para usarlo solo en aquellas circunstancias en las que es más probable que tenga éxito. Por lo tanto, la contabilidad retroactiva se puede incorporar en un sistema híbrido en el que se pueden utilizar múltiples métodos de contabilidad de la producción.

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