Tasa de crecimiento sostenible

La tasa de crecimiento sostenible es el aumento máximo en las ventas que una empresa puede lograr sin tener que respaldarla con deuda adicional o financiamiento de capital. Un equipo de gestión prudente tendrá como objetivo un nivel de ventas que sea sostenible, de modo que la empresa no aumente su apalancamiento, minimizando así el riesgo de quiebra. Cuando la gerencia quiere evitar asumir nuevos financiamientos, aún puede aumentar las ventas al participar en una o más de las siguientes actividades:

  • Cambiar la combinación de ventas hacia productos más rentables, que generan más flujo de efectivo para respaldar ventas adicionales.

  • Acelere la rotación de cuentas por cobrar y / o inventario. Hacerlo minimiza la necesidad de financiamiento de capital de trabajo, que de otro modo aumentaría en concierto con un nivel de ventas ampliado.

  • Minimice los pagos de dividendos. Un gran pago de dividendos puede afectar seriamente el crecimiento de una empresa, por lo que los inversores deben estar dispuestos a renunciar a los dividendos para respaldar un crecimiento de ventas inusualmente fuerte, al menos a corto plazo.

El cálculo de la tasa de crecimiento sostenible es el siguiente:

Rentabilidad sobre el capital x (1 - Relación de pago de dividendos) = Tasa de crecimiento sostenible

Por ejemplo, una empresa tiene un rendimiento del capital del 20% y una tasa de pago de dividendos del 40%. Su tasa de crecimiento sostenible se calcula de la siguiente manera:

20% de retorno sobre el capital x (1 - 0,40 ratio de pago de dividendos)

= 0,20 x 0,60

= 12% Tasa de crecimiento sostenible

En el ejemplo, la empresa puede crecer a una tasa sostenida del 12% anual. Cualquier tasa de crecimiento más allá de ese nivel requerirá financiamiento externo.

En realidad, la tasa de crecimiento sostenible tiende a caer con el tiempo, por varias razones. Primero, el mercado inicial al que se dirige un producto se saturará. En segundo lugar, una empresa tiende a vender productos y servicios cada vez menos rentables a medida que persigue un mayor crecimiento de los ingresos. En tercer lugar, una empresa tiende a crecer en complejidad a medida que aumenta de tamaño, por lo que los gastos generales corporativos adicionales reducen sus ganancias. Y, por último, los competidores tienden a atacar a empresas extraordinariamente rentables reduciendo los precios, lo que aumenta la presión sobre los precios y, por tanto, reduce los niveles de beneficios. En consecuencia, las empresas suelen experimentar una tasa de crecimiento sostenible que disminuye con el tiempo.

Artículos Relacionados