Costos controlables

Los costos controlables son aquellos costos que pueden modificarse en el corto plazo. Más específicamente, se considera que un costo es controlable si la decisión de incurrir en él reside en una persona. Si, en cambio, la decisión involucra a varios individuos, entonces un costo no es controlable desde la perspectiva de ningún individuo. Además, si un tercero impone un costo a una organización (como impuestos), este costo no se considera controlable. Ejemplos de costos controlables son:

• Publicidad

• Bonificaciones

• Materiales directos

• Donaciones

• Cuotas y suscripciones

• Compensación de los empleados

• Material de oficina

• Formación

El reverso de un costo controlable es un costo fijo, que solo puede modificarse durante un largo período de tiempo. Ejemplos de costos fijos son el alquiler y el seguro.

Un costo podría ser incontrolable en un nivel bajo de una organización, porque un gerente de primera línea no está autorizado a incurrir o detener el costo. Sin embargo, se podría otorgar esta autoridad a un gerente de mayor rango. Por lo tanto, es posible que el costo sea controlable en los niveles superiores de una organización e incontrolable en los niveles inferiores. Por ejemplo, la decisión de pagar la capacitación de los empleados puede recaer en un vicepresidente y no en un gerente de departamento local, por lo que el costo es controlable por el vicepresidente, pero no por el gerente de departamento.